31 de gener del 2013

Palabras de Francisco Rodríguez Lozano

Desde el CNPT queremos transmitir la deuda que tendremos para siempre con Manel Nebot. Fue una persona clave en la Junta de Gobierno. Era muy participativo y con su forma de ser ilusionaba y arrastraba al resto, pero aportando a la vez mesura y reflexión en una época de gran actividad del Comité.

Desde un aspecto mas personal, compartí con Manel su enfermedad y durante los años 2008 y 2009, tuvimos muchas conversaciones y confidencias que a mi desde luego me supusieron un gran apoyo por el que le estaré siempre agradecido.



Vídeo de Vicenç Navarro

Vídeo de María José López



Como muchos ya sabéis, yo conocí a Manel hace más de 10 años, en 2001, aún recuerdo muy bien ese día, aquella entrevista de trabajo. Siempre pienso que en ese momento no era consciente, pero aquel fue seguramente uno de los días clave en mi vida, por un lado porque ese día conseguí mi primer trabajo en el mundo de la salud pública, y por otro lado y aún más importante, porque ese día el destino puso en mi camino a alguien que con el tiempo llegaría a convertirse en una persona fundamental en mi vida. Esa persona era Manel.


Yo no os voy a hablar más de todos sus méritos profesionales, porque creo que a estas alturas del homenaje ya han quedado claros. Y en ese sentido, os doy de verdad las gracias a todos los que habéis hablado antes que yo y habéis puesto de manifiesto la relevancia del trabajo de Manel, porque yo siempre he pensado que en determinados momentos o en determinados aspectos no se le había valorado lo suficiente. Y me ha hecho inmensamente feliz que hoy aquí se hayan reconocido todos sus méritos, que sin duda son muchos y muy importantes.

Dicho esto, de lo que yo os quiero hablar no es tanto de las cosas que hizo, sino de cómo las hacía, porque creo que eso es realmente lo que marcaba la diferencia entre Manel y todos los demás. Manel tenía una manera de trabajar que seguramente no es la más habitual. Seguro que habéis oído muchas veces eso de que para ser bueno en el trabajo hay que separar lo personal de lo profesional o no involucrarse demasiado. Bueno, pues Manel era incapaz de involucrarse poco en algo, y aún más incapaz de dejar de lado su humanidad o de dejar de preocuparse o de interesarse por las personas que tenía alrededor, por mucho que éstas perteneciesen a su ámbito laboral.

Y esa fue una de las grandes lecciones que aprendí de Manel: que el rigor científico o la excelencia profesional no tienen por qué estar reñidas con la calidad humana. De hecho, él demostró que no sólo no están reñidas, sino que preocuparte por las personas que trabajan contigo, preocuparte por mantener un buen ambiente de trabajo, preocuparte porque no falte el sentimiento de equipo, no sólo es que sea admirable en términos humanos sino que además es la mejor manera de conseguir equipos de trabajo motivados, entregados y dispuestos a trabajar tanto como haga falta para que las cosas salgan bien. Manel consiguió formar un equipo así en su servicio, en el SAMI, un equipo del que estaba orgulloso y a la vez un equipo que estaba muy orgulloso de él. Un equipo que hoy esta aquí, una vez más, y como siempre, al lado de Manel.

Os quería contar una anécdota que, quizá es una tontería, pero que creo que ilustra muy bien esa calidad humana que hacía de él alguien a quien directamente era imposible no querer. Hace ya bastantes años, en una de las reuniones que teníamos los dos, a las que yo habitualmente llevaba una lista con todos los temas que teníamos que tratar (proyectos, informes, artículos, etc...), le dije –yo le llamaba jefe muchas veces- “bueno jefe, por dónde empezamos?”, y él me dijo, “hombre, primero lo más importante”. Entonces yo miré la lista, que ese día era más que larga y como de costumbre llena de cosas que eran para ayer, y sin tener muy claro que era lo más importante me encogí de hombros y se la enseñé, diciendo “tú mismo!”. Entonces él cogió la libreta la dejó encima de la mesa y me volvió a repetir, “primero lo más importante”, y añadió “¿Cómo están tus padres?”, eso era lo importante, ni los proyectos ni los informes ni los artículos, sino cómo estaban mis padres. Ése era Manel: primero le importaban las personas y luego todo lo demás.

Y con los años fueron muchas, incontables las reuniones en las que pensamos en futuras líneas de trabajo, en las que diseñamos proyectos, planificamos cursos, hablamos hasta hartarnos de la relevancia de evaluar las intervenciones en salud pública… pero también, en cada una de esas reuniones hubo un momento para hablar de lo importante, para contarme cuál era el último lagarto que Gerard había metido en casa o la última peli que había ido a ver con Marina al cine.  

Su calidad humana le llevaba también a tratar a todo el mundo como a un igual. Manel era de las pocas personas que conozco a la que le era indiferente tener delante a un becario que a un alto cargo, él era el mismo con todos, los trataba a todos por igual, a todos como a personas. Seguramente por eso fue alguien también especialmente querido entre la gente más joven, tanto en su servicio como en otros servicios de la Agencia, como fuera de ésta.

Además de la calidad humana, hay dos cualidades más que me gustaría destacar de Manel, una de ellas era su fortaleza y entereza ante cualquier dificultad. Manel era, sin duda, una de las personas más fuertes que he conocido. Algunos creen que ser fuerte es ser capaz de imponer tu opinión a los demás o de demostrar que tienes poder frente a otros, pero eso no es ser fuerte. Ser fuerte es volver de una consulta médica en la que te acaban de decir que te tendrás que enfrentar a un transplante de médula y aún así ser capaz de mantener la sonrisa y de interesarte por cómo están los demás. Ser fuerte es salir de una sesión de quimio con una bomba de infusión implantada y en vez de irte a casa a descansar, quedar para hacer un café y estar riéndonos y haciendo planes de futuros proyectos, antes de irnos a dar cuatro horas de clase a los alumnos del Máster, eso es ser fuerte. Y la fortaleza de Manel, os lo aseguro, no tenía límites.

Por último, creo que es obligado hablar de una característica que compartíamos:  nuestro optimismo casi indestructible ante la vida. Aunque confieso aquí que yo descubrí que el mío no era tan indestructible como pensaba el día que Manel nos dejó. En cualquier caso, su optimismo y su positivismo, además de contagiarse, le llevaron a  ser capar de disfrutar de cada momento de la vida, de absolutamente todo lo que hacía, de los proyectos, de las clases, de su familia, de su casa de Llucena… No sé, cada vez que pienso en lo injusto que es que alguien como él muriera tan joven, una de las cosas que me consuela es pensar que quizá murió joven, pero vivió y disfrutó más Manel yéndose a los 55 años que la mayoría de la gente que conozco aunque vivieran hasta los 120.

En fin, habría muchas más cualidades de Manel de las que me gustaría hablaros, como su genial sentido del humor o muchas otras, os hablaría durante horas, pero no podía ser. Lo que sí quería era enseñaros algunas imágenes, y os he hecho un video cortito con fotos que intentan reflejar por un lado su calidad profesional pero también esa capacidad de disfrutar de cada uno de los momentos que pasó –en este caso con su equipo, con el SAMI, y también con algunos amigos del SAMI (y amigos de Mane)- como Esteve-. He intentado que no fuese un video triste, porque eso no le hubiera gustado nada a Manel, a ver si lo he conseguido. Cuando acabe os hago un comentario final y luego ya me despido.

Bueno, pues espero que os haya gustado el video, he visto algunas lágrimas pero también muchas sonrisas, así que me doy por satisfecha porque sé que eso es lo que le hubiera gustado a Manel, veros sonreír.

Cada canción de las que ha sonado en el video tiene su historia, pero sólo un comentario respecto a la última canción -Always look on the bright side of life, mira siempre el lado bueno de la vida-. Puse esa canción por un lado porque es la banda sonora de La vida de Brian, que es una de las pelis favoritas de Manel, pero también porque creo que resume perfectamente su filosofía de vida.

No querría acabar sin dirigirme a las dos personas de las que he estado oyendo hablar casi a diario durante los últimos 10 años, es casi como si os hubiera visto crecer a través de las historias que Manel me ha ido contando de vosotros. Gerard, Marina, no puedo ni imaginar por lo que habéis pasado o por lo que estáis pasando, pero yo os quería decir que siendo hijos de Manel, no tengo ninguna duda de que estáis programados genéticamente para ser felices y para hacer felices a todos los que tengáis alrededor como hacía él. Estoy segura de que os esperan unas vidas maravillosas, ya lo veréis. En cualquier caso, si hay algo que a mi se me da bien es “trabajar para un Nebot”, así que cualquier cosa que necesitéis, por favor no dudéis nunca en pedírmela vale? Y lo mismo lo hago extensivo a Queru y a Carmen, Manel también me habló muchas veces de vosotras, gracias a los 4 por compartir a Manel con nosotros y por dejarnos disfrutar de él todo este tiempo.

Y por último, y con la esperanza de que me oigas desde allá donde estés de vacaciones. Jefe, me dijiste varias veces en plan de coña que esperabas que cuando me dieran el Nobel me acordara de nombrarte en los agradecimientos, pues bien, como es bastante obvio que no me lo van a dar, aprovecho para darte las gracias aquí, aunque ya te las di en su momento, y no sabes cuánto me alegro de haberlo hecho. Gracias, infinitas gracias por haber creído en mí, por todo lo que me enseñaste, gracias por todos los momentos que compartimos juntos, muchas gracias por todo.
Y con respecto a todos los planes relativos a la evaluación y a todo lo que hablamos durante estos últimos meses, sólo decirte que no me van a faltar las fuerzas para luchar por que todo lo que te importaba siga adelante, te lo aseguro.
Quizá ya no estés aquí, pero siempre vas a estar con nosotros.

Gracias a todos por escucharme, pero sobretodo gracias a todos los que quisisteis de verdad a Manel, gracias a los que como yo, le querréis siempre.

Palabras de Carlos Alberto González


Gracias a los organizadores por este merecido homenaje a Manel y por permitirme decir algunas palabras. Conocí a Manel cuando realizó el MIR de  Medicina de Familia y Comunitaria, la especialidad que había ayudado a crear Amando Martín Zurro en Catalunya. Con Josep María Antó éramos los profesores de Epidemiología y Salud Pública. Manel formó parte de un grupo de residentes que realizó  luego una carrera brillante en Salud Pública, junto a entre otros, Jordi Sunyer, Jordi Alonso y Carmen Borrell.   

Ha sido una gratificación oír a Carmen Borrell decir que ofrecimos una visión diferente de la medicina y que eso tuvo importancia en su posterior dedicación a la Salud Pública.  Con Manel teníamos además una relación especial, porque yo hacia poco que había arribado  de Rosario (Argentina) y el me contaba que tenia  familiares en Rosario, así que este era un tema frecuente en nuestras conversaciones.   

En la vida uno tiene oportunidad de conocer personas profesionalmente  brillantes pero que como personas dejan mucho que desear, o excelentes personas que profesionalmente sin embargo  no destacan. Manel formaba parte de ese escaso grupo que reúnen las dos condiciones: son profesionalmente muy buenos y son excelentes personas, con grandes cualidades humanas, tal como nos los ha comentado María José y lo demuestra la masiva asistencia a este acto.  


La mayoría de nosotros estamos en el campo sanitario y sabemos que la vida no es infinita y la muerte es inevitable.  Pero nos duele mucho la muerte prematura, la que se produce cuando no toca, como es el caso de una persona joven como Manel. Los que son creyentes en dios, encuentran un consuelo, al pensar que la vida continua en el cielo, con dios. Pero los que no somos creyentes pensamos, que la muerte prematura es una gran injusticia  y nos produce una profunda tristeza y dolor. Manel, vivirás siempre en nuestro recuerdo y en nuestro corazón.   

Palabras de Iñaki Galán


En primer lugar, os traslado todo el cariño de los amigos y compañeros del Centro Nacional de Epidemiología, donde Manel era muy conocido y querido. Aunque su carrera profesional estuvo estrechamente ligada al ámbito de Barcelona y Cataluña, su prestigio como referente en la prevención y control del tabaquismo, así como en las estrategias de intervención y evaluación en Salud Pública, ha sido ampliamente reconocido tanto a nivel nacional como fuera de España. 

He tenido una suerte inmensa de poder trabajar directamente con Manel, coincidiendo en el Comité Editorial de Gaceta Sanitaria y en el Grupo de Trabajo sobre Tabaquismo de la Sociedad Española de Epidemiología. Personalmente, admiraba su capacidad de alternar de forma equilibrada el diseño y trabajo de campo de las intervenciones preventivas (el trabajo en las trincheras), con la divulgación científica (escribiendo cerca de doscientos artículos) basada principalmente en la evaluación de las intervenciones.

Me asombraba la enorme intensidad que ponía en el trabajo, planteando siempre una ingente cantidad de ideas, intentando buscar no una sino varias soluciones a los problemas que nos íbamos encontrando. La misma intensidad que la que empleaba en comer donde me resultaba sorprendente la capacidad de concentración que ponía en el plato, dando cuenta de él en minutos. Durante ese tiempo, dejaba de hablar (y de escuchar), absorto en la tarea reparadora, para luego, mientras los demás seguíamos comiendo, iniciar tres o cuatro temas diferentes de conversación. Pasábamos de la lectura al cine o teatro, a la política, o a temas científicos. Siempre con la máxima intensidad.

El Grupo de Trabajo de Tabaquismo, tendrá que seguir adelante sin las genialidades de Manel, que siempre encontraba las respuestas y soluciones más sorprendentes a las preguntas más enrevesadas; fomentando la cohesión del equipo, creando un buen ambiente, dejando hacer, y dejándose convencer, pero siempre llevando las riendas del grupo ¡¡Cómo te vamos a echar de menos!!.

Gracias Manel.

Paraules del Jordi Alonso


Amigues i amics, 

com molts de vosaltres, he tingut la gran sort de conèixer en Manel i compartir molts aspectes de la seva vida professional i personal. D’entre la gran quantitat d’activitats i passions de la seva vida, el Manel va participar molt activament en el Màster en Salut Pública, organitzat conjuntament per les universitats Pompeu Fabra i Autònoma de Barcelona. Com a actual director del programa, és un deure i un plaer reconèixer el gran agraïment dels professors i dels alumnes mestratge per la seva intensa tasca docent.  Aquest agraïment i l’exemplaritat de la seva tasca van ser els motius de que el comitè de direcció del programa, en la seva darrera reunió de l’any passat, acordés la creació de la Beca Manel Nebot.  Aquest n’és el text oficial:

"En Manel Nebot ha estat professor del programa de Mestratge en Salut Pública de Barcelona des dels seus inicis, l’any 1989. Va participar molt activament en les assignatures de Promoció i Protecció de la Salut i especialment, des del 2006, com a professor responsable de l’assignatura Avaluació de Polítiques i Programes Preventius.  I també, en la tutorització de múltiples tesines i en d’altres activitats docents del programa.  La seva actitud rigorosa, integradora i engrescadora i la gran importància que li va donar a l‘actvitat acadèmica han estat una aportació molt enriquidora per a tots els qui hem tingut la sort de compartir-la.  De manera especial molts alumnes entre qui va tenir sempre gran popularitat. 

Davant la trista desaparició del nostre company, la primera d’un professor del programa, i tenint en compte la seva tasca acadèmica continuada, entusiasta i excel·lent, el comitè de direcció de l’MSP ha decidit convocar de manera anual la Beca Manel Nebot amb la finalitat de facilitar i estimular la incorporació d’alumnes amb un afany de formació excel·lent i una visió integradora de la salut pública.

La beca cobrirà la totalitat de les despeses de matriculació en el programa (120 ECTS) i serà atorgada al candidat o candidata millor avaluat/da per un jurat encarregat pel comitè de direcció del programa a principis de cada any escolar.  S’acorda, per unanimitat, iniciar la tramitació perquè la convocatòria, un cop aprovada pels òrgans acadèmics competents, sigui efectiva en el proper curs (2013-14). 

Comitè de Direcció del Màster Oficial en Salut Pública de Barcelona, el 18 de Desembre de 2012.”

Rebeu una forta abraçada.

Palabras de Itziar Larizgoitia

Conocí a Manel hace veinte años, en la escuela de salud pública de Johns Hopkins.   Habíamos conseguido una beca Fulbright para realizar un estadía postdoctoral de  un año, comenzando en septiembre del  1992.  Todavía tengo presente aquel primer encuentro en la pequeña oficina sin ventanas donde unos pocos esperábamos completar los papeleos de nuestros visados.  Entre aquel nerviosismo del momento primero destacaba sin duda la presencia sonriente, afable y calurosa que caracterizaba a Manel y que representaba y representó una verdadera acogida hacia él mismo y su familia.  Allí, nos hicimos compañeros de universidad y amigos.  Fue el año en el que Bill Clinton ganó su primera carrera electoral a la presidencia y Hopkins concentraba a un pequeño núcleo de activistas que animaron nuestra llegada.   Manel se unió a la División de Ciencias de la Conducta y Educación para la Salud, de Hopkins, que dirigía David Celentano, quien fue su mentor y jefe.   Allí profundizó en las metodologías y conceptos que en aquel momento le interesaban y que luego desarrollaría a su vuelta a Barcelona en el IMPSB.   Así colaboró en el curso principal de su departamento (“metodologías avanzadas en la investigación de la conducta”) y en un gran proyecto epidemiológico longitudinal que estudiaba las actitudes y conducta sexual de una muestra de mujeres portadoras de HIV en Baltimore.   


Además de ello, fue capaz de desarrollar un proyecto de investigación propio dentro de aquel macro estudio, el cual se vería publicado al año siguiente en el Journal de Epidemiology and Community Health con Manel como autor principal.  Pero no se puede entender la figura de Manel sin destacar sus rasgos humanos.  Manel y Queru, quien realizaba entonces una estadía en el Shock Trauma Center de Baltimore, se convirtieron en el corazón de una comunidad amplia de estudiantes, colaboradores de la universidad y profesores.  Su casa se convirtió en un lugar de encuentro, donde alternaban paellas, barbacoas y debates sobre la vida académica de Hopkins y donde Manel contagió su pasión por su área de trabajo y por su ciudad.  Por  allí pasaban Alba Benaque, Joan Benach, Ana Díez, Pepe Tapia, Antonio Daponte, Javier Nieto quien ya estaba en la faculty, y muchos, muchos más. 



A su vuelta a Barcelona supo mantener una relación muy estrecha, tanto con la escuela, a donde volvió en varias ocasiones para continuar profundizando en sus líneas de trabajo, como con sus amigos de entonces, entre quienes yo tuve la suerte de encontrarme, y por lo que le estoy muy agradecida.  Recordaré, como tantos otros, su sonrisa afable, su inquietud profesional y su sencillez.    



Un abrazo Manel.  Hasta siempre.

Paraules del Ferran Ballester


No recorde amb exactitud quan vaig conèixer en Manel Nebot. ¿Seria quan ell estava fent la mili a València? –on, per cert, el va pillar el cop d’estat del Tejero-. Seria a algun bar del barri del Carme?, o algun estiu a Llucena?, o a Barcelona als primer cursos de la Hopkins? o a algun dels primers congressos de la SEE o de SESPAS?. No ho sé, però no te importància. És com si hagués conegut el Manel de tota la vida; era un molt bon amic i un gran col·lega, i tot amb gran naturalitat. Amb ell sempre em trobava a gust. 

Vaig tindré la sort de compartir moments de la seua vida professional i de la vida més personal.En el camp de la salut pública vaig tenir l’oportunitat de treballar amb ell al projecte Aphekom per a l’avaluació de l’impacte de la contaminació de l’aire en la salut dels  ciutadans europeus. El Manel havia treballat més en projectes relacionats amb altres riscos per a la salut i tenia menys experiència en el camp de la pol·lució atmosfèrica. No obstant això, molt prompte en Manel es va convertir en una persona clau dins del projecte, tant per assolir els objectius científics i de desenvolupament, com per la seua contribució a les bones relacions personals i de grup. El Manel es va guanyar tothom, tant per la seua experiència i professionalitat, com, també, per la seua intel·ligència, la seua calidesa i el seu excepcional sentit de l’humor.
A la vessant més personal de la vida,  tant el Manel com la seua família sempre ens van acollir, tant a mi com la meua família amb carinyo i generositat.  La seua pèrdua ens ha dolgut molt i ens sentim molt solidaris amb tots ells.
Amb tota la pena però, em considere afortunat d’haver conegut el Manel, una persona extraordinària, que tant al camp professional com al camp més personal sempre era el mateix, era el Manel.

Vídeo de Joseba Zabala

Vídeo de Joan C. Surís


Presentación de Carme Cabezas


Vaig conèixer al Manel al darrer any de residència, allà al 88. Ell estava replicant l’estudi del Russell sobre l’efectivitat del consell mèdic per ajudar a deixar de fumar i jo feia el tercer any de residència a “la Muni” (amb Joan Gené i altres), el centre docent de Medicina de Família de la Plaça d’Espanya, que era un dels que participava a l’estudi. Era un projecte d’aquells que cal fer, un d’aquells treballs fonamentals que canvien la pràctica clínica. Coneixent a Manel, un pot  entendre com per a ell (com bon epidemiòleg) no era correcte  aplicar directament el que l’estudi de Russell mostrava al Regne Unit, per què calia replicar-ho amb rigor, adaptant els elements de context a una pràctica diferent, com era la dels nous centres, en aquell moment, d’atenció primària de Catalunya.   Va ser la primera vegada de moltes que vaig sentir parlar d’ estudis quasi-experimental i assajos comunitaris i de la importància de l’avaluació. 

Aquest interès per la metodologia i l’avaluació era una constant en Manel  i va ser una constant del nostre treball conjunt a través dels anys. Va ser també la primera vegada que vaig començar  a treballar en tabaquisme, un tema que, en molta part gràcies a ell, mai he abandonat.  En aquell estudi ja participava en Carlos Martin, que ha compartit amb ell nombrosos projectes més.   Li he demanat a en Carlos que ressaltés una qualitat d’en Manel, i ell  destaca el fet d’escoltar, la seva disponibilitat per parlar dels diferents temes del nostre interès, i destaca una frase: “Si vols, en parlem”.


Quan vaig acabar la residència, va haver l’oportunitat d’entrar a treballar com becària en un projecte de tabaquisme amb el Manel al servei de Promoció de la Salut que portava en Joan Ramon. Allí havia un equip magnífic de persones amb les que van treballar com la Manuela, la Pura, la Francina, la Mercè,  entre d’altres. Amb aquell equip i sobre tot amb en Manel (i en Joan Ramon) vaig aprendre de forma pràctica la majoria de les bases de la recerca en promoció de la salut i en prevenció, sobre tot la que tenia que veure amb l’atenció primària. Manel era també metge de família i això encara apropava més els punts de vista. Vam construir un estudi plegats: volíem avançar en les intervencions sobre tabac des de la primària i saber que passava amb l’efectivitat del consell més llarg, d’infermeria i amb el xiclet de nicotina, que estava començant llavors. Recordo com es va construir el projecte, com Manel t’ indicava els passos a seguir i, en ocasions, amb qui podies consultar: ara toca calcular la mida de la mostra (“comence-ho a parlar amb en Pep Roca...”). Després discutien les idees, a vegades a les famoses sessions dels divendres,  i reformulaven la proposta. Havia torns escrits en un paper per utilitzar l’únic ordinador del servei, i quan aquest fallava arribava en Manel Tristán amb la seva solució pràctica. Vam presentar l’estudi en els diferents centres que llavors lideraven la reforma  (Canteres, Passeig de Sant Joan, Rec Comtal, etc) i desprès ho van portar a terme.  Recordo a Manel obert a les aportacions, respectuós amb el treball, ajudant-te  a créixer. 


Van ser els temps dels intercanvis amb Leif Solberg, de l’ adaptació  i aplicació a Espanya del “Doctors helping smokers”, que tenia que veure amb l‘ interès del Manel de trobar intervencions avaluades i fàcilment aplicables des de l’atenció primària. Manel era llavors i ho va ser sempre, proper, rigorós, treballador, franc i insistent.  De la seva insistència i perseverança en positiu son fruits algunes de les  nostres publicacions junts i el fet de que jo en fes sòcia de la SSPCB.  


 Silvia Granollers, sens dubte una de les infermeres de referència en tabac des de l’atenció primària, diu “Manel tenia un do, sabies que estava allí i que el que pensés o fes seria  útil, bo, important, ...” 

Un exemple de la seva implicació amb la prevenció i la promoció de la salut des de l’atenció primària va ser la creació del Grup d’Estudis per a la promoció de la Salut (GEPS) a la seu de CAMFIC. Ens reuníem tard per la tarda i vam decidir (idea d’ell) fer un DELPHI sobre prioritats en la prevenció i la promoció de la salut.  Ell estimava molt aquell estudi i, de fet, més de 15 anys més tard, vam fer un segon des del PAPPS per veure com havia evolucionat la situació. 


Quan va acabar la beca vaig demanar una beca al FIS per continuar allí treballant amb ells. El destí em va sorprendre i em vam donar la beca, però no per allí sinó per un altre institució de prestigi , i ells em vam recomanar acceptar-la. Allí va acabar el meu treball establert amb en Manel. Però ens hem mantingut en contacte i hem col·laborat en diferents projectes, per exemple al seu curs d’avaluació, al grup d’avaluació, a l’ impuls i formació dels grups de tabac d’atenció primària i sobre tot  al grup d’Educació per a la Salut del PAPPS, que vam co-coordinar junts. Allí vam coincidir amb gent extraordinària com Fernando (el trobem a faltar), Teresa, Jose Luis, José Antonio, Xus, Elena, Rafa, Rodrigo i altres. Vam treballar força, fent  guies, treballs de recerca, tallers, revisions, curs a distància,  i projectes. Va haver moments de treball productiu conjunt magnífics i com, quan això passa,  sol passar, també ens van riure junts . 


M’han demanat que descrigui, sobre tot, la meva experiència  com becària  i és el que he intentat fer.  Manel t’empenyia suament i et feia créixer. Et deia el següent pas i et supervisava per a què fossis avançant correctament. Era algú que et donava suport, t’animava, que  et feia desenvolupar el sentit crític, i veure les coses bones i els inconvenients d’una determinada postura. Tenia les seves pròpies idees que defensava amb convenciment, que a vegades no comparties del tot, però que sempre, sempre, sempre t’enriquien.  Manel era treballador, generós i amic de la gent i dels amics, comptava amb tu, per exemple,  per oferir places pel teu equip als seus cursos, per Menorca...  


Vull acabar amb una frase de Mireia Jané que també va ser becària amb ell. Mireia diu “ Gran epidemiòleg, incentivant en tot moment el treball en equip i amb un somriure permanent” . 

Gràcies, Manel, per tot el que ens has donat. Estàs, sempre, amb nosaltres. 

30 de gener del 2013

Presentació de l'Esteve Fernández

Presentación en powerpoint
En aquesta presentació intento ensenyar la dimensió més científica i acadèmica del Manel.  És complicat cenyir-se a això, i per això mateix la presentació comença amb unes fotos del Manel rodejat de gent. Hi ha moltes fotos com aquesta, amb el Manel rodejat de persones, d’un grup de recerca, de treball,... n’he vistes moltes amb aquest comú denominador!  I de la mateixa manera, en Manel, que era un home de salut pública, va combinar l’acció, la intervenció, amb la recerca. El Manel no entenia les intervencions en salut pública sense recerca i, tanmateix, tampoc entenia la recerca sense una conseqüència pràctica per a l’acció. I vaig tenir la sort d’acompanyar-lo en un bon tros d’aquest camí que malauradament es va estroncar fa uns mesos.

En termes de publicació, el Manel té gairebé 180 articles... un centenar en castellà i la resta en anglès, en revistes nacionals i internacionals, i amb un bon grapat de cites, gairebé 2000. En les diapositives es poden veure alguns d’aquests articles, des dels més iniciàtics, com ara una enquesta pionera sobre estils de vida en adolescents de Barcelona (en català, publicat a Gaceta Sanitaria) fins els darrers, com ara l’avauació de la llei del tabac de 2006, article publicat a una revista de primera fila (EHP) i que sens dubte va contribuir al canvi de la legislació en demostrar la seva manca d’eficàcia a l’hostaleria.

I en Manel era un home de societats i de grups, i vull remarcar la seva dedicació a la Societat Espanyola d’Epidemiologia (SEE), on va posar en marxa el Grup de Treball en tabaquisme (el GTt) que ha estat un lloc de confluència d’epidemiòlegs dedicats al control d’aquest problema de salut. La SEE i el GTt eren prioritaris pel Manel, ja que en ell confluïen anhels de molts anys en un ambient de feina i festa que no deixava immune a ningú. 

Fernando G. Benavides, President de la SEE, va anunciar durant el darrer congrés de la SEE, a les poques hores de conèixer la trista notícia de la mort del Manel, que la SEE patrocinaria un número especial de Gaceta Sanitaria amb una selecció dels articles més representatius de la seva carrera. Aquest número especial, amb els articles en facsímil, es presentarà durant el proper Congrés Iberoamericà d’Epidemiologia i Salut Pública que es farà a Granada, al setembre de 2013.

En Manel va publicar molts articles a Gaceta Sanitaria. Puc dir que era la “seva revista”. I no només perquè hi va publicar, sinoperquè va fer d’editor associat durant gairebé 15 anys seguits amb tres directors diferents (Fernando Rodríguez-Artalejo, Toni Plasència i servidor). I fins i tot més recentment, ja amb la Carme Borrell de directora, era l’editor invitat a cura de les recensions bibliogràfiques, a banda de fer de revisor extern quan se li demanava. Tanta era l’estima que tenia per Gaceta Sanitaria que es va deixar convèncer i va acceptar publicar com a una monografia el llibre que feia anys que concebia sobre mètodes d’avaluació en salut pública.

Per a mi, com per a d’altres, ha estat una sort poder compartir feina i vida amb el Manel aquests anys. És una llàstima no poder repetir més les passejades per algun carrer d’alguna ciutat europea durant alguna de les reunions que anàvem tenint aquí i allà. Però sempre estarà amb nosaltres, sempre estarem amb tu!

Fotos de l'Acte d'Homenatge al Manel













Presentació de la Carme Borrell

Presentación PowerPoint

Vaig conèixer al Manel durant la carrera de medicina, que vam fer des de 1974 fins els 1980. Malgrat no anàvem al mateix curs, ens solíem trobar a les diverses mogudes de la facultat. Vam començar la carrera l’últim any del franquisme. Moments importants van ser: Franco mort quan fèiem segon curs, poc després hi va haver la històrica manifestació on reclamàvem “llibertat, amnistia, estatut d’autonomia” (1 de febrer de 1976). Les primeres eleccions democràtiques van ser el 15 de juny de 1977, quan acabàvem tercer de carrera. La Constitució s’aprova quan fèiem quart (6 de desembre de 1978). La transició democràtica no va ser fàcil, i sovint ens trobàvem en assemblees, manifestacions, a les escales de la facultat ...i també al bar. Jo recordo el Manel, l’Eduard, el Gerard i el Nofre, sovint acompanyats per una guitarra, a les escales de la facultat. Altres companys de curs ens acompanyen avui: Gerard, Veva, Jordi (Alonso), Jaume, Carme (Aragó). El Jaume Estany és la persona que ha aconseguit totes les fotos que us mostro.

Els anys 1982 a 1984 el Manel va fer l’especialitat de Medicina de Família i Comunitària a Barcelona, formant part de la quarta promoció (el 1981 va anar a la mili). Ell i jo vam coincidir en el mateix equip quan ell començava el tercer any a Cornellà i jo acabava la residència (juntament amb l’Helena Pañella i la Silvia Sanjosé). La Conferència d’Alma-Ata havia estat el 1978, les transferències de la sanitat a Catalunya el 1981 i  la reforma de l’atenció primària començava el 1984.Durant la residència hi va haver persones que ens van influir en el nostre futur com a salubristes com són el Josep Mª Antó, el Jordi Varela, el Carlos Alberto González o l’Amando Martín Zurro.Cal assenyalar com el Manel va estar involucrat amb tasques de la Societat Catalana de Medicina Familiar i Comunitària, i així per exemple va formar part del comitè científic de les III Jornades de Medicina Familiar i Comunitària.

Vam entrar de becaris a l’Institut Municipal de la Salut un darrera l’altre (jo el 1984 i ell el 1985) on vam coincidir amb el Jordi Sunyer, el Jordi Alonso i la Silvia Sanjosé – la generació de la plaça Lesseps). Va ser poc temps però intens. La manca de places de Medicina Familiar i Comunitària junt amb la nostra introducció prèvia  a la salut pública, va fer que ens presentéssim quan va sortir el concurs oposició de 13 places el 1985. Sempre recordarem el sopar a casa del José Cuervo, que era el màxim directiu de l’Institut, just quan vam aprovar les oposicions. I així és com des de començaments de 1986 vam començar a treballar plegats durant quasi 27 anys, primer a l’Institut Municipal de la Salut, després a l’Institut Municipal de Salut Pública i finalment a l’Agència de Salut Pública de Barcelona. Mai vam treballar els mateixos temes, però sempre vam tenir relació professional.

Són molts anys junts, quasi tota una vida professional. Definiria aquest anys com “anys de muntanyes i valls” ja que les relacions no sempre són fàcils. El que si que puc dir amb profunda certesa, és que, els darrers temps, la meva relació amb el Manel va ser bona. Vaig poder parlar amb ell sobre els avenços de la seva malaltia, sobre els seus fills, sobre com anaven els seus amics de la facultat ... juntament amb una complicitat respecte a temes professionals.

Gràcies Manel.

29 de gener del 2013

Record del Manel, per Andreu Segura


Volia contribuir amb alguna paraula i no ho acabava de tenir clar, perquè encara que amb en Manel varem parlar prou vegades gairebé sempre era de feina i tot i que en veure’ns notava un corrent d’afecte – que no vol dir coincidència, ja sap l’Esteve que de vegades discrepàvem – sentia com una recança per no distraure els que mantenien una relació més profunda, més intensa o més llarga. Encara que conservi un missatge electrònic que li vaig enviar el mateix dia que havia de rebre l’empelt sobre una possible recensió bibliogràfica a Gaceta. En Manel havia assumit aquesta responsabilitat que abans m’havia tocat a mi durant uns anys. Recordo molt bé la seva invitació per donar notícia de la nova edició del Piédrola, un llibre que evocava mals records de la llarga època en la que la salut pública formava part dels cossos de l’administració de l’estat durant la dictadura i que vés per on acollia ara com a nous autors bona part dels col·legues abans molt crítics amb el llibre. Una situació que es podia entendre com de reconciliació i normalització però que almenys en aparença semblava simplement una integració. I ho recordo be perquè varem comentar-ho obertament. I em va convèncer que finalment la fes jo. Amb un resultat em temo que poc comprensible. Però avui potser paga més la pena constatar que des de l’hospital estant en Manel em va contestar telefònicament acceptant la meva nova proposició, un llibre sobre la visió de salut pública de les malalties cròniques que per cert ja està a punt d’edició, ara sota la responsabilitat de la Glòria Pérez. Aquesta capacitat d’en Manel de seguir fent fins al límit m’admirava. És, sense dubte, una resposta intel·ligent, però de vegades costa molt dur-la a la pràctica.

En visitar el blog m’he adonat que estava malfixat i que tot això ho podia compartir. I he descobert, a més, que el Manel vivia de petit  – sinó és que fins i tot hi havia nascut—a Sants, el meu barri. Encara que a mi el carrer de Premià em quedava una mica lluny; però més a prop en canvi hi havia l’Agrupament Escolta de Santa Tecla i, no sé si en Manel ho va arribar a veure, un camp de futbol de terra on els diumenges al matí jugava un equip d’afeccionats que es deia UD Sansense (que llavors no es posava la t) de tercera regional com a molt. Un barri del qual, quan parlava amb algú amb ànim de fer-li notar la categoria del lloc, li deia que era el de la Núria Feliu i Mestres, el del Josep Carreras i Coll o el de l’Àngel Casas i Mas. Als més grans o quan la conversa derivava una mica nostàlgica, els esmentava en Vicente Febrer Solsona, campió d’Espanya de lluita lliure, nascut al carrer de Vallespir el 1926. Tot un personatge. Tenia una botiga de motos i a la porta, tancat amb la reixa de fora que en obrir la botiga feia escaire amb la paret, hi exposava viu el lleó Vicentet amb el que fins i tot feia campanya per a regidor de l’Ajuntament l’any 1970 em sembla. Pel terç familiar, com l’Eduardo Tarragona.  Segur que en Manel n’estava al cas. Perquè era del cinquanta-set, poc més o menys del mateix any que en Josep Antoni Pujante, també metge però sobretot alpinista, que jo sàpiga l’únic veí de Sants que ha fet el cim de l’Everest, el 1993. A partir d’ara quan vulgui fer veure algú que el meu barri també te la seva importància li diré que és el barri on el Manel Nebot i Adell, excel·lent metge de salut pública, competent i compromès, anava a l’escola, a l’acadèmia Molina, precisament.

Andreu Segura


27 de gener del 2013

El Manel a la mili


Vaig coincidir amb el Manel en una reunió parlant d'un projecte sobre tabaquisme. Els anys passen volant, però tinc la impressió que no fa pas tant. Ara me n'adono quant certes són les coses que he sentit sobre ell, ara que ja no hi és. Tant en aquell moment com en les repetides vegades que ens vàrem anar trobant, col·laborant en diferents projectes, sempre va mostrar la seva extraordinària energia, vitalitat i... fertilitat imaginant el següent projecte que caldria fer.

Però el que durant molt temps em va estar rodant pel cap, des del primer cop que el vaig veure, és que em resultava tant familiar. Li vaig preguntar on havia fet el batxillerat, per si havíem coincidit. Però em va confirmar que no. Un dia, no recordo perquè, traginant unes caixes a casa, va aparèixer la foto. I allà era. A Sant Climent de Sescebes. Fent 'la mili', havíem estat companys de barracó. Encara tinc la foto al despatx. Vaig pensar que li ensenyaria el proper cop que ens veiéssim per una altra d'aquelles reunions de projecte. Però no ha pogut ser. La foto continua al meu despatx. Però ara la vull compartir amb vosaltres.

Espero que el trobeu.

Josep Antoni Pascual





24 de gener del 2013

In memoriam - publicado en Gaceta Sanitaria

In memoriam - Manel Nebot (1957-2012)


El pasado 18 de octubre la muerte se llevó a nuestro compañero y amigo Manel Nebot. Después de años luchando con una leucemia, a finales de verano emprendió con coraje un tratamiento que no pudo superar. Deja una lección de excelencia profesional y humana, pero también una gran tristeza en todos los que tuvimos la suerte de compartir parte de nuestra vida con él. Manel era un “caso único”; despistado e informal por fuera, escondía una mente brillante y un corazón inmenso tras sus camisas de cuadros y su habitual sonrisa. Tenía la impagable cualidad de hacer que el trabajo “no pareciera trabajo”; en las reuniones siempre había toques de humor, en los proyectos siempre ideas innovadoras, en sus equipos de trabajo siempre una complicidad que iba más allá de lo profesional, y es que trabajar con Manel era disfrutar. Nunca supo (en realidad nunca quiso) separar lo personal de lo profesional, y fuimos muchos los que aprendimos con él que la calidad humana y la mentalidad científica no tienen por qué estar reñidas.
Manel estudió Medicina en la Universitat de Barcelona y formó parte de las primeras promociones de residentes en Medicina Familiar y Comunitaria. Se decantó por la vertiente más comunitaria de la especialidad y es parte de la «generación de la Plaza Lesseps», entre la que destacan quienes se formaron como médicos/as de familia y luego, encandilados/as por la epidemiología y la salud pública, recalaron en el Instituto Municipal de la Salud (IMS) de Barcelona. Durante estos años se doctoró en Medicina, y obtuvo la especialidad de Medicina Preventiva y Salud Pública. Desarrolló su carrera profesional en el IMS, primero como jefe del Servicio de Promoción de la Salud y más tarde, en su continuación como Agencia de Salud Pública de Barcelona, como jefe del Servicio de Evaluación y de Métodos de Intervención. Cabe destacar la excelente relación que, dentro y fuera de su servicio, mantuvo con los profesionales más jóvenes, a los que trató siempre como a iguales. Eso le llevó a ser una de las figuras más admiradas y respetadas por los jóvenes epidemiólogos de este país. Manel fue, sin duda, un «viEJE» con espíritu joven (término que acuñó él mismo en referencia al Grupo EJE-Grupo Español de Jóvenes Epidemiólogos), dispuesto no sólo a enseñar sino también a no dejar nunca de aprender.
Fue una persona comprometida con su institución, como lo fue con la Sociedad Española de Epidemiología y otras sociedades científicas a las que pertenecía. Era persona de participar, ayudar y liderar; un trabajador incansable, con visión estratégica y contagiosa. Junto con otros compañeros, desarrolló la base de conocimiento empírico para poder definir las necesidades y posibilidades de intervención, construyendo un modelo de programas de educación sanitaria en el marco escolar basado en datos, buscando la sostenibilidad y asentado en la evaluación de la efectividad. Aplicó luego esos conceptos a otros campos (desde las intervenciones breves en la consulta de atención primaria hasta la evaluación del impacto de la ley del tabaco), siempre con un equipo cualificado de colaboradores y una red de complicidades con compañeros de otras instituciones. Manel fue un investigador, un epidemiólogo que no concebía las intervenciones en salud pública sin investigación para conocer dónde y cómo intervenir, y sobre todo para evaluar científicamente esas intervenciones. Haber compartido con él proyectos y artículos nos permite hablar de su excelencia científica: concebía preguntas útiles de investigación, escribía fises y grants casi irresistibles para los evaluadores, interpretaba (demasiado) rigurosamente los datos, y escribía y defendía los artículos con pasión. Su huella también queda en forma de artículos: hemos contado 181 artículos en PubMed y más de un millar de citas en el Web of Knowledge.
Manel fue un profesor, un maestro de generaciones de salubristas que pasaron por las aulas del Máster en Salud Pública de Barcelona desde sus inicios en 1981. Docente inquieto, trataba de dar respuesta a las necesidades, y fue pionero en enseñar métodos de evaluación de políticas y de programas de salud pública. Fue profesor asociado en la Universidad Pompeu Fabra, y Bloomberg School of Public Health en la Johns Hopkins University, y le costaba mucho decir que no a invitaciones de otras universidades, institutos y escuelas, donde impartió incontables cursos. La reflexión en torno a la dificultad de evaluar políticas y programas en salud pública fue acaso su propuesta docente más relevante, destacando la edición de la monografía sobre evaluación en Gaceta Sanitaria.
Nos hemos quedado prematuramente sin un buen compañero y mejor amigo. Manel se ha ido, pero su admirable humanidad, su incansable pasión por el trabajo, su amistad incondicional y su extraordinario buen humor nos acompañarán siempre. Por último, no queremos acabar este escrito sin expresar nuestro afecto infinito a su amada Queru, y a sus hijos Gerard y Marina, de quienes tan orgulloso se sentía.
  • a Agència de Salut Pública de Barcelona, Barcelona, España
  • b Institut Català d’Oncologia, Universitat de Barcelona, L’Hospitalet de Llobregat, Barcelona, España


23 de gener del 2013

Manel Nebot, mestre i company


L'any 2012 ha estat un any molt difícil amb la pèrdua de persones molt properes de la meva família i la mort d’en Manel s’ha afegit d’una forma molt dura ja que, intentant ser positiva tal com ell ho transmetia, estava segura de que se'n sortiria d'aquesta malaltia. Malauradament no ha estat així.

D’en Manel encara recordo molt bé les seves paraules d'entusiasme quan em va trucar a Londres --on ja hi portava quatre anys-- perquè deixés la boira i el mal temps i tornés a Barcelona. Sense arguments per fer front a la seva innata capacitat de convenciment no vaig poder negar-me. I me n’alegro molt de la meva decisió, que d'entrada significà deixar el meu marit --metge ell també-- treballant en un hospital anglès durant bastant més temps i viure "en pont aeri de caps de setmana". Però la meva incorporació al Servei de Promoció de la Salut de l'antic Institut Municipal de Salut Pública, dirigit pel Manel, em va permetre posar en pràctica barcelonina els coneixements epidemiològics del Regne Unit. I al seu costat, i això va ser molt important per a mi, vaig aprendre molt, a més del plaer de treballar amb una gran persona. Van ser anys intensos d’aportacions tècniques de tots plegats i de molt treball de camp on al gran epidemiòleg "no li queien els anells" per posar en pràctica i veure in situ els resultats obtinguts, incentivant en tot moment el treball en equip. Tot plegat sempre amb un somriure permanent.

Després amb el temps els nostres camins, sempre dins de l'àmbit de la salut pública, es varen separar. Però, les seves ensenyances, la seva manera de fer i desfer i sobretot aquella trucada ara fa 15 anys han quedat per sempre més dins meu.
Gràcies Manel, fins sempre.

Mireia Jané

21 de gener del 2013

Manel y el proyecto IMPASHS

José Precioso, partner del proyecto IMPASHS (proyecto europeo que Manel lideró), nos ha enviado esta foto de la última reunión del proyecto, que tuvo lugar en Portugal.

IMPASHS final meeting, 28th & 29th April 2011, Universidade do Minho, Braga (Portugal)



19 de gener del 2013

Record de l'Albert i la Catherine


Manel, 
fa gairebé 3 mesos que ens vas deixar i encara se’ns fa molt difícil, a tots plegats, admetre que ja no hi ets. Que no podrem comptar amb la teva calidesa, el teu gran somriure i el teu acolliment. Podríem fer una llarga llista del teu llegat com a professional. Des de la primera classe teva que molts vam tenir la sort de rebre sobre avaluació de programes i mètodes d’intervenció (cap allà a finals dels 80) fins al darrer sopar del GTT, en el que, pocs dies abans d’entrar a l’hospital, encara discutíem sobre temes professionals i amb una admirable fermesa, parlaves del repte que tenies per davant.
Però en el teu record ens pesa encara més el Manel que vam tenir oportunitat de conèixer en un àmbit una mica més familiar, compartint temps, neguits, converses de llibres, musica, astronomia... La teva ajuda ha estat clau a la nostra vida. Mai ho oblidarem.

Albert i Catherine






Manel i el projecte Aphekom


El projecte Aphekom es va engegar el juny de 2008 amb l’objectiu de desenvolupar instruments per a proveir els decisors, professionals i ciutadans europeus d’informació útil per a la presa de decisions encaminades a reduir els riscos relacionats amb la pol·lució de l’aire. En el projecte hi vam participar més de 40 investigadors i professionals de 25 països europeus.
La coordinadora del projecte va ser Sylvia Medina, de l’Institut de la Veille Sanitaire de França, i en ell participarem molts especialistes que ja haviem col·laborat en projectes anteriors relacionats amb el tema, com ara el projecte Aphea i l’Apheis.
El Manel havia treballat més en projectes relacionats amb altres riscos per a la salut com ara l’exposició, tant activa com passiva, al tabac,  i era un expert ben reconegut en el camp de l’avaluació d’intervencions. Al projecte Aphekom va ser el líder del ‘work package’ d’avaluació interna que havia d’assegurar que el projecte aconseguira els objectius marcats i tinguera l’impacte desitjat sobre els grups diana.


Des del començament del projecte el Manel es va guanyar tothom, tant per la seua experiència i professionalitat, com, també, per la seua intel·ligència, la seua calidesa i el seu excepcional sentit de l’humor.
En menys d’un any es va convertir en una persona clau dins del projecte, tant per assolir els objectius científics i de desenvolupament, com pels estímuls positius que aportava a les relacions humanes i el benestar entre els qui participàvem en el projecte.
A la foto de la 2ª reunió del projecte, 11 mesos després del seu començament, es pot sentir de manera molt palesa la influència de Manel sobre el conjunt, la llum que d’ell emanava , el bon humor, l’harmonia... ¡què a gustet estàvem a la seua ombra!
Ferran Ballester

El Manel a diverses reunions i jornades sobre tabaquisme

L'Esteve Saltó ens ha fet arribar algunes fotos de reunions, congressos i jornades compartides amb el Manel durant els últims anys.

Manel i Esteve durant el Congrés Europeu de Tabaquisme a Varsòvia (juny 2002)   

"Spanish group" al Congrés Europeu de Tabaquisme a Varsòvia (juny 2002)

"Esteves" i Manel al Congrés Europeu de Tabaquisme a Varsòvia (juny 2002)

Comité organitzador del Congrés del CNPT 2004

Jornades científques sobre tabaquisme passiu (2005)

Jornades científques sobre tabaquisme passiu (2005)

Reunió de la "Red de prevención del tabaquismo en jóvenes (REPTA), 2008